MACHISMOS

Violencia machista, peculiaridades ibéricas.

“Ritos como el festejo del Toro de la Vega encauzan la violencia. Los animalistas deben comprender que la ausencia de este festejo lo pagarían las mujeres del pueblo».

Luis Martín Arias, Catedrático de Cine de la Universidad de Valladolid.

 

“Tanto rollo, tanto rollo por un toro, con la de niños que hay por ahí pasando hambre; anda que no hay cosas más importantes en las que pensar”. Hay quien no llega, es solo cuestión de evolución.

El desarrollo de ciertas capacidades intelectuales en ámbitos como el literario, artístico o científico no implica haber alcanzado también un punto de evolución similar en el plano emocional. No todo el mundo es capaz de conmoverse con el sufrimiento de un ser vivo. Sujetos intelectualmente dotados pueden perfectamente carecer de los resortes necesarios para desarrollar una respuesta de rechazo, o cuando menos de alarma, ante hechos de una crueldad innecesaria.

 

 

Pero yendo más allá, una educación desde la infancia en la insensibilidad frente al sufrimiento de un ser vivo, introduciendo a los niños en encierros y capeas infantiles, provoca sutilmente un aletargamiento de ciertas facultades y de una forma paulatina va haciendo ver como normales ciertos rituales; aquí ya tenemos la tarea medio hecha.

Si se hace bien y vamos subiendo el umbral de salvajismo paso a paso, con los años es fácil asimilar atrocidades cometidas delante de nuestras narices sin pestañear. Pero a fin de cuentas, según dicen algunos, los animales no sufren, el dolor no les produce sufrimiento; eso solo es una peculiaridad de los humanos (1). Hablamos solo de un “lindo dolor ético”, hay animales que están hechos para luchar, para cazar; animales “hechos” para sufrir.

 

 

Tengo un vecino cazador que le hacía meter a su hijo de 12 años las manos en un cubo de sangre para hacerle superar “sus miedos”. Tiene que hacerse un machote, “a ver si me va a salir raro”.

 

 

Entrados en el siglo XXI seguimos llevando a cabo una educación de los niños más propia de otros tiempos lejanos y oscuros. Esta educación termina por establecer una relación con “las bestias” primitiva, lo que fomenta y hace preponderar la figura masculina del macho agresivo y cazador. La violencia en el macho no solo no resulta reprobable, sino que supone un valor añadido y un modelo que incluso es visto con cierta complacencia y agrado por cierto tipo de mujer. Por otra parte, y según las estadísticas, el asunto empieza a ser cada vez más frecuente y preocupante entre las adolescentes; donde se está produciendo un repunte de los casos de violencia machista y lo que resulta más lamentable es que la mitad de las víctimas de esta violencia no la identifica como tal (2).

 

 

Tal vez sea este tipo de educación recibida lo que nos lleva a tener manifestaciones como las del Catedrático de Valladolid. ¿No se nos encienden todas las alarmas ante declaraciones como esta? Y lo que es peor, ¿por qué no producen ningún efecto a nivel gubernamental?; si no es esto enaltecimiento del terrorismo, ¿qué lo es entonces? La educación ha surtido efecto.

 

 

Todo esto nos plantea la necesidad urgente de afrontar un cambio en el modelo de educación actual, que nos lleva a ver como normales hechos como el martirio de un animal y cómo esta insensibilidad se traslada con naturalidad a otros actos abominables como son los perpetrados contra las mujeres.

 

 

Enaltecer en estos ámbitos la figura del macho violento y agresivo hacen asumirlo como modelo y auparlo como ídolo, haciendo que sus “desahogos” con las mujeres no solo no nos resulten inadmisibles, sino que sean tomados como una expresión y una consecuencia lógica, normal y deseable de su masculinidad desarrollada.

Es indispensable empezar por dar visibilidad al problema y apoyar todas, y especialmente “todos”, la lucha contra las Violencias Machistas. De ti depende.

Alonso Lobo

 

1. Libro ‘Tauroética’ de Savater revive debate sobre fiesta de los toros. María Paulina Ortiz. El Tiempo, 24 abril 2013.
2. La mitad de las víctimas adolescentes no identifica la violencia machista. Virginia López Enano. El Pais, 14 mayo 2015. Datos ANAR, 2014.

 

 * Publicado en Diagonal y NUEVAGUIA.es.